“CON TODO MI CARIÑO Y RESPETO: QUE LES DEN POR CULO”

En la vida podemos clasificar a las personas en un sinfín de categorías. Me van a permitir ustedes que hoy, flamante lunes de Agosto al sol, y de bastante mala hostia con el mundo, yo las clasifique solo en dos: Las que se mojan; las que se implican; las valientes (el valor no es sino miedo bien disimulado), las que no están de paso por la vida… Y las demás. Las otras. Las que se quedan mirando. O lo que es peor; las que miran hacia otro lado. Como si nada estuviera pasando. A todos esos y esas con todos mis respetos y con todo el dolor de mi corazón, les deseo todo aquello que vaticinaba sabiamente el alemán M. Niemoller en los versos que cierran este artículo. Porque, sin duda, se lo merecen…

En base a tal criterio nos encontramos, por tanto, ante un escenario habitado

Estudiantes
Estudiantes

por dos tipologías de seres humanos diferenciados y opuestos. Por un lado tenemos a quienes piensan únicamente en su culo y sálvese quien pueda, y por otro a quienes arriman el hombro; a quienes solamente se mueven del sofá si lo que se quema es su casa o a quienes cogen un cubo de agua y echan un capote a su vecino; a quienes piensan que lo tenemos todo perdido y que no mueven ni un dedo y a quienes prefieren luchar por si hubiera quizás algo que ganar. No vaya a ser que, oigan ustedes, consigamos algo. Quita, quita…Déjate de historias que se está mejor tranquilito en casa viendo fútbol o el Sálvame. ¡Y además la revolución da una pereza que te cagas!

Además, diré que me es totalmente indiferente, cual sea el contexto en el que apliquen tales sujetos y sujetas su inaceptable doctrina de silencio y pasividad. Porque unas veces será en plena vía urbana cuando algún miserable gañán le pegue dos guantazos a su mujer antes sus ojos y en la acera de en frente y otras será en su barrio cuando dos adolescentes escupan a un indigente y lo graben descojonadas de la risa con el teléfono móvil; y porque cierta vez fue cuando ETA o el GAL, o Al Qaeda o algún estado “democrático” asesinaba vilmente en Euskadi, en Francia, en el metro de Madrid o en Irak, y había que salir a la calle a decirles que no estábamos de acuerdo; y otras veces serán mañana o pasado cuando nuestra clase política, que nos debe tomar a todos por gilipollas (bastante acertadamente, visto lo visto), una vez saqueados impunemente nuestros derechos laborales y sociales, deje al pueblo, como carnaza muerta, en manos de los poderes capitalistas; en manos de los buitres carroñeros…

Causas todas ellas insignificantes como para mover un dedo, oigan. Pecata minuta…

ni un paso atrás
ni un paso atrás

Y mientras hoy mucha gente las está pasando canutas, en su portal, en su barrio, en su familia, en su cuadrilla, en el mundo, y sino es hoy será mañana, ellos continuarán

inamovibles en su sosegado y egoísta mundo de mazapán escudados en los típicos “yo paso” , “para qué voy a moverme si no vamos a conseguir nada”, “a mí es que me viene fatal…” y toda esa retahíla de memeces siempre muy lógicas, con mucho criterio y muy fundamentadas.

Excusas baratas que uno ya no sabe si devienen, bien por que se tiene horchata en las venas (casuística esta, aunque igualmente injustificable, un pelín más potable), bien porque se es un escéptico y recalcitrante meahogueras, o bien (y estos serían los peores) porque se es un ser egoísta, acomodado, jeta, y por defecto y a mi modo de ver, bastante indeseable.

¿Se imaginan que habría sido de este mundo si por los tibios y los pasivos hubiera sido? Nunca habría existido Mayo del 68, ni primaveras árabes… Y hoy seguiría existiendo el muro de Berlín, el apartheid en Sudáfrica, y los negros seguirían siendo esclavos sin derechos en Norteamérica, y las mujeres no tendrían derecho a sufragio. (y que no les suene tan lejano; tiren de hemeroteca; no hace tantos años de todo esto.) Y Malala estaría sola ante los talibanes…Y así hasta infinito…

Así que no se desgañiten,  (a mí todavía me cuesta) : Seguirán existiendo ese tipo de personas per sécula seculorum. Nos guste o no. Estoy convencido de que ni siquiera fruto de estas letras, que se pretenden directas al mentón y que les interpelan directamente, harán acto de autocrítica alguno; ni reflexiones profundas al respecto; ni pensarán que quizás su actitud ante la vida y para con el resto, no es correcta ni moralmente aceptable. Ninguno de ellos despertará. Es una guerra perdida…

Lo cual supone una conclusión nada reconfortante…Y es que solo cuando

Se llama futuro...
Se llama futuro...

ellos, los que se mantienen al margen y a la sopa boba se movilicen con los demás, lograremos una sociedad mejor y más justa…Y esto se parecerá mucho más a una democracia y a un mundo que valga la pena…

Dicho lo cual y para concluir diré, con la boca bien grande, que a los primeros les profeso una profunda y sincera admiración. Y que yo me quedo con esos. Con los cuatro gilipollas de siempre. Los que lo intentan. Con los que creen que hay cosas ante las que no se puede ni se debe callar. Quienes siguen creyendo que luchando se puede cambiar el rumbo. Gente rara, friki y sin amigos; perroflautas, radicales y delincuentes (depende del diario que lean o canal que sintonicen); gente que invierte (vaya usted a saber porqué inexplicable misterio de la vida) su salud, su energía y su tiempo, sacrificando sus espacios personales y los de quienes les rodean en pro de algunas convicciones, de un puñado de sueños y quizás de algún ideal descabellado (y anacrónico, dirán algunos). Quienes creen que un mundo mejor y más justo es posible. No existe la utopía, compañeros. Lo imposible, solo tarda un poco más…

Rodea el Congreso
Rodea el Congreso

Por ellos no me tiro yo, haciendo la carpa, por el puente Róntegui; ni reniego más de lo debido de esta especie a la que pertenezco… Y a ellos les ofrezco mi más sincero y profundo agradecimiento .Por ellos no pierdo yo la fe. Y por ellos me resisto a creer que todo vaya a ser en balde. Y por ellos no creo, en el fondo, que todo esté perdido…

Gracias por existir. En mi nombre; y en el de mis futuros hijos…

A los otros y otras; a los que una vez más, se van a quedar en casa tocándose los huevos y los ovarios mientras otros hacen la guerra por ellos y por sus vástagos; con todo mi respeto y todo mi cariño… Y permítanmelo hoy que estoy de resaca y digo más tonterías de lo debido…Que les den. Que les den mucho por culo. Que os den mucho por culo. Desde el más profundo cariño y respeto.  Y Dios quiera que las llamas no asedien nunca sus casas; porque ese día puede que no haya nadie para ayudarles a apagar el fuego…

Vayan para ellos los versos del pastor luterano alemán Martin Niemoller, quien fuera confinado en su día en un campo de concentración nazi…

Cuando los nazis vinieron ” (traducción del alemán)

Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
me callé,
porque yo no era comunista

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata

Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío

Cuando vinieron a buscarme a mí,
ya no había nadie que pudiera ayudarme…»

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
× ¿Cómo puedo ayudarte?